LA DICOTOMÍA DEL CONTROL – Psicotrading parte 5

Escrito por CSebas

"Una meta sin un plan es sólo un deseo".

Más de 25 años invirtiendo. Empecé con los bienes raíces (mi enfermedad), esos ingresos me permiten diversificar mis inversiones y mis ahorros. Me gusta comentar mi educación financiera, dar a conocer mi cultura del ahorro, hablar de mis experiencias y de cómo generar ingresos pasivos.
Opero con un perfil de alto riesgo, diversifico mis inversiones y siempre pienso a largo plazo.
Toda la información aquí plasmada es sólo para fines educativos e informativos y no debe considerarse asesoramiento fiscal, legal o de inversión.

27/05/2022

DICOTOMÍA DEL CONTROL

La dicotomía del control, una de las herramientas utilizadas desde hace más de 2.5oo años más útil y sencillas de implementar en nuestro día a día.
Aparentemente puede resultar obvia, no obstante, su aplicación no es tan fácil, y la falta de ésta es lo que ocasiona muchas veces, un sufrimiento humano innecesario,
Esta herramienta nos ayuda a identificar qué es lo que depende de nosotros y qué no. Dicotomía quiere decir que hay dos respuestas posibles ante cualquier situación.

 

«La felicidad y la libertad comienzan con la clara comprensión de un principio: algunas cosas están bajo nuestro control y otras no. Sólo tras haber hecho frente a esta regla fundamental y haber aprendido a distinguir entre lo que podemos controlar y lo que no, serán posibles la tranquilidad interior y la eficacia exterior». – Epicteto.

 

Te recomiendo para mejorar tus habilidades en la dicotomía del control y en aprender a resistir tus impulsos, te recomiendo jugar al ajedrez.

 

La especialista en rendimiento personal Meggin Macintosh brinda ejemplos de ámbitos que no puedes controlar:

* Tráfico. Puedes decidir la hora de salida, el medio de transporte o la ruta que vas a tomar, pero es imposible controlar el flujo de tráfico.
* Clima. Quejarte de la lluvia, el granizo o el viento es absolutamente estéril. De lo que se trata es de adaptarte a las condiciones externas.
* Horarios de los vuelos. Cuando un avión se retrasa, en vez de enojarte o estresarte puedes leer un buen libro, escuchar tu música favorita o realizar llamadas pendientes.
* Tus padres. La clave es modificar tu relación con ellos para reducir las fricciones y favorecer la armonía.
* Creencias de otras personas. Sólo gastarás tiempo y energía al tratar de alterar lo que sustenta el mundo interior de alguien.
* Actitudes de los demás. A excepción de tus hijos, si censuras el modo de proceder de alguien, inmediatamente obtendrás una justificación con resentimiento.
* Ética de los otros. Si la inmoralidad de alguien te causa malestar, todo lo que puedes hacer es renunciar a su compañía.
* Emociones ajenas. La empatía te permite descubrir y comprender las emociones de los demás, pero eso no significa que las puedas cambiar.
* Educación de hijos ajenos. Ver cómo algunos padres cometen errores es parte de la vida adulta. Todo lo que puedes hacer es educar bien a tus propios hijos.
* Opinión política de otras personas. Es otra área en la que no tienes influencia, por lo que engancharte en una discusión solamente servirá para estresarte y generar un alejamiento con las demás personas.

 

«Señor, concédeme serenidad para aceptar todo aquello que no puedo cambiar, fortaleza para cambiar lo que soy capaz de cambiar y sabiduría para entender la diferencia».  – Marco Aurelio.

Tendemos a lamentarnos de las actuaciones del pasado pero de nada sirve.  Empieza a aplicar LA DICOTOMÍA DE CONTROL en tu vida.

 

• Si no escuchas a tu insatisfacción, ella te hablará con dolor de cabeza
• Si no escuchas a tu ira, ella te hablará con la gastritis
• Si no escuchas a tu miedo, el te hablará con el estreñimiento
• Si no escuchas a tu deseo de decir «no», el te hablará con trastornos estomacales
• Si no escuchas a tu pasión, el te hablará con una infección
• Si no escuchas a tu creatividad y tu talento, te hablarán con el aumento de peso
• Si no escuchas a tu afectividad, ella te hablará con la dermatitis

 

Si no escuchas a tu espiritualidad, ella te hablará con el cuerpo… que se enferma

No deberíamos olvidarnos nunca de escucharnos. Cada emoción no escuchada deja una marca en el cuerpo. El cuerpo es el espejo de nuestra alma.

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